Juan Francisco Jimenez JacintoEsta semana os explicamos cómo hacer muy bien algo muy fácil. Ya que es fácil, vale la pena hacerlo bien.
- Pela las patatas, córtalas en tiras y déjalas en remojo con agua fría durante unos minutos.
- Sácalas del agua y escúrrelas. Sécalas con papel absorbente.
- Pon una sartén con abundante aceite de oliva a calentar y cuando el aceite esté caliente, introdúcelas poco a poco. No nos interesa que en este paso queden doradas ni crujientes. Déjalas en la sartén durante 4 minutos.
- Sácalas y escúrrelas sobre un papel de cocina absorbente.
- Vuelve a calentar el aceite y una vez esté bien caliente vuelve a freír las patatas hasta que queden bien doradas y crujientes. Después vuelve a retirar el aceite sobrante con papel absorbente.
- Una vez las tengas bien escurridas, sálalas un poco y estarán listas para servir.
#QuéComemosHoy
“Mi Corazón palpita…” (Las patatas; hasta en los poemas!)
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