Gestión de residuos en la Ciudad Condal

“Es gratificante ver que la gente se preocupa por el planeta”

Alejo Linares es el encargado del Punto Verde de Barrio de los Jardines de las Tres Torres de Barcelona

Alejo Linares en el Punto Verde de Barrio de los Jardines de las Tres Torres, Barcelona
Alejo Linares en el Punto Verde de Barrio de los Jardines de las Tres Torres, Barcelona
Andrea De Sentmenat Rivero Andrea De Sentmenat Rivero

Alejo Linares (Barcelona, 1980) es el actual encargado del Punto Verde de Barrio de los Jardines de las Tres Torres de Barcelona desde hace 10 años. Tras haber trabajado de montador de aluminio, sus conocimientos de medio ambiente y los cursos de gestión de residuos a los que acudió le permitieron cubrir una suplencia en el Punto Verde, donde fue ascendiendo hasta ocupar su actual puesto. Esta iniciativa sostenible, impulsada por el Ayuntamiento de Barcelona en 1992, ya cuenta con 28 puntos habilitados para depositar residuos especiales del hogar.

 

P: ¿En qué consiste una jornada laboral en un Punto Verde?

R: El 80% del tiempo lo paso atendiendo a las personas que entregan residuos. Los clasifico en los contenedores e introduzco la entrada en el ordenador, especificando el tipo de residuo. Hace poco registré 62 entradas y no se trata precisamente del Punto Verde más frecuentado. Pero es un movimiento que cada vez va a más, porque hace 10 años recogíamos la mitad de residuos que ahora.

 

P: No todo va al mismo contenedor. ¿Cómo clasifican los residuos?

R: De diferente manera según el tipo de residuo. Hay contenedores para todo: pilas, bombillas, cartuchos de impresora, CD, porexpan, juguetes, ropa, zapatos, aparatos electrónicos, radiografías, pinturas, disolventes, productos de limpieza de casa, insecticidas, matarratas, cápsulas de la Nespresso y baterías de coche y moto. Los contenedores más llenos son el de ropa, el de las cápsulas de Nespresso, el del aceite y el de los aparatos electrónicos. Y los que menos, los de disolventes y ácidos, porque la gente todavía no sabe que los cogemos.

 

“Personas con síndrome de Down se encargan de limpiar los recipientes para reciclar el aceite”

 

P: Ustedes gestionan los deshechos según su tipología. ¿Qué se hace con los que llegan a este Punto Verde?

R: Algunos se los llevan camiones de empresas de logística a Montjuic o al Fórum, donde separan entre lo que se puede reutilizar y lo que se puede reciclar, que no es lo mismo. Un objeto se reutiliza cuando puede seguir haciendo la misma función y se recicla cuando sirve para otras cosas distintas de su función inicial. Otros se los llevan a las plantas incineradoras de Gavà y de Sant Adrià del Besós, formadas por 4 hornos entre ambas. Son gestionadas por la empresa pública de servicios medioambientales TERSA, que controla que los hornos quemen el plástico y aprovechen el humo para generar energía.

 

P: ¿Qué residuos tienen un destino diferente?

R: La ropa y los juguetes, que son entregados a hospitales, centros de acogida, albergues y a personas que los necesitan. Además, los ordenadores que todavía funcionan se emplean para impartir talleres de informática a personas con discapacidad. Y los que no, se utilizan para enseñarles a repararlos. Un objeto curioso son las radiografías, que se gestionan de otra forma: son transportadas a Canadá, donde se encuentra la única empresa en el mundo capaz de extraer y reutilizar la plata tan contaminante que contienen.

 

Linares junto a un punto de información sobre los Puntos Verdes

Linares junto a un punto de información sobre los Puntos Verdes

 

P: Hace 9 años empezó el auge del reciclaje. ¿Hay algún beneficio para el ciudadano que colabora?

R: Sí, una vez solicitada la tarjeta de usuario en la página web del Área Metropolitana de Barcelona o en el mismo Punto Verde, se contabiliza las veces que acude una persona a entregar residuos. Con un mínimo de 10 entradas, se le aplica un descuento del 10% en el recibo del agua al año siguiente. Con acciones de este tipo se consigue motivar a la gente para que recicle. Y no se trata solo de eso, sino que otros también se benefician de esta acción: las personas con síndrome de Down se encargan de limpiar los recipientes para reciclar el aceite que se entregan a las familias que lo deseen. De esta forma, pueden tener un trabajo estable.

 

P: ¿En otros lugares se realiza este tipo de acciones?

R: Hay sitios en los que tienen proyectos parecidos, pero no como los Puntos Verdes. En Madrid, por ejemplo, existen los “Puntos Limpios”, pero son vertederos. También en Francia están empezando a hacerlo, porque recuerdo una vez que estaba en el Punto Verde del Paralelo y vinieron unos parisinos interesados por la iniciativa. Querían copiar e implementar el modelo allí. Es gratificante ver que la gente se preocupa por el planeta.

 

“Poder ayudar a la gente es lo más satisfactorio”

 

P: ¿Recuerda alguna anécdota en los 10 años que lleva en este puesto?

R: Sí. Una vez vino una chica con una caja. Muerta de vergüenza, la dejó en la entrada y se fue apresuradamente. Cuando la abrí, vi que dentro había 5 consoladores. No me lo esperaba porque era la primera vez que llegaba ese tipo de objeto, pero los puse en el contenedor de aparatos electrónicos.

 

P: ¿Qué es lo que más le gusta de su trabajo?

R: Poder ayudar a la gente es lo más satisfactorio, porque aunque haya información en los carteles exteriores sobre los deshechos que acogemos, siempre surgen dudas y acaban acudiendo a mí.

Andrea De Sentmenat Rivero

Hola, soy estudiante de Periodismo, Publicidad y Relaciones Públicas. "Eterna aprendiz" es como me defino, siempre con hambre de saber y conocer nuevas ideas.