Anna CarricasLa moda no solo queda reservada para el ser humano. Actualmente, los perros tienen complementos y ropa de marcas de lujo mundialmente conocidas como Fendi, Tiffany & Co., Luis Vuitton, entre otras, que utilizan su talento creativo para diseñar productos especialmente dedicados a las mascotas peludas de cuatro patas. Otros emprendedores ven una oportunidad con este nuevo nicho y crean sus empresas de lujo.
El mundo de las mascotas abarca muchos objetos y complementos que las marcas de lujo aprovechan para abrir un nuevo mercado. Se pueden encontrar cuencos para la comida, bolsas de transporte, collares, ropa, camas, y muchos más objetos. Los altos precios de estos productos marcan la exclusividad. La casa Prada vende una bolsa para perros por 2.200 euros.
La costumbre de vestir a los perros se remonta en Inglaterra en plena época Victoriana, cuando los perros, mayoritariamente razas pequeñas, sufrían debido a las bajas temperaturas del país. Esta costumbre evolucionó hasta lo que se conoce hoy en día creando marcas específicas en ropa y complementos para perros.
Linda Higgins es una de las diseñadoras más conocidas debido a su trabajo en alta costura canina, que buscaba un estilo sofisticado en sus creaciones. Higgins crea sus trabajos pensando en razas pequeñas como el Chihuahua, el Yorkshire Terrier, el Caniche, entre otras. Algunas de sus creaciones se pueden ver en películas como ‘Un Chihuahua en Beverly Hills 3’ o ‘Siete psicópatas’.
El mundo de las mascotas se ha ido incorporando al día a día y, para muchos, el perro es un miembro más de la familia. Por ello, las marcas han adaptado su producto al consumidor pensando en el can. Emprendedores han visto la oportunidad de negocio y han creado marcas de lujo. Pagerie es una firma francesa, fundada por Mandy Madden Kelly, que esta está especializada en el diseño de accesorios como correas, collares y arneses. Trabaja con materiales de la mejor calidad para garantizar la seguridad del producto. Pagerie es tienda ultra lujosa y los precios oscilan desde 78 hasta 631 euros.
Isabel II también tiene tienda
La Reina Isabel II no se ha quedado atrás y tiene su propia sección destinada a los accesorios para perros en su tienda oficial llamada ‘Royal Collection Shop‘. La familia británica siempre ha estado acompañada por sus fieles perros raza Corgi, por ello su amor hacia estos animales la ha conducido a lanzar una línea para ellos. En la página web se encuentran mantas, juguetes, bandanas, camas y muchos otros productos que abarcan precios muy diversos. La ’boutique’ se puede considerar una marca de lujo por ser de la realeza.
La semana de la moda
Las desfiles de moda ya no son exclusivos para el ser humano. Los perros acaparan los focos y los humanos se convierten en accesorios en estas pasarelas. Anthony Rubio es un modista de mascotas y diseñador de moda de mujer conocido internacionalmente que ha presentado sus colecciones en la semana de la moda de Nueva York. En sus diseños caninos predominan los vestidos con diferentes capas, lentejuelas, colores metalizados y satinados, entre muchos otros. Rubio tiene la imagen de marca de lujo al crear diseños exclusivos tanto para perros machos como hembras.
La ropa no lo es todo
La moda canina abarca diferentes aspectos. No en todos los países conciben como moda solo la ropa y accesorios, sino que también tienen en cuenta otros aspectos, como por ejemplo, el corte del pelo. En Taiwán, se busca la simetría en el peinado, en China predominan los tintes de colores en el pelaje del perro y en Japón estos suelen tener un estilo más hípster, con las características gafas de pasta negras, bufandas y camisas de cuadros, y no tan chic como lo es en la alta costura.
Tal como cuenta la historia, los accesorios y vestidos de los perros están presentes desde hace muchos años. Actualmente, forma parte del día a día de muchas personas que tienen a sus mascotas vestidas como completas muñecas. Hay que diferenciar que hay casos que es por necesidad, debido a que el perro genéticamente no tiene el doble manto que les protege del frío y el calor y, en otro, es simplemente por placer.
