La esperanza de un sueño era grande en el barrio de Gracia. Desde primeras horas de la mañana, los aficionados del Club Esportiu Europa comenzaron a animar a su equipo en las calles. El Nou Sardenya juntaba una mezcla emoción entre ilusión y nerviosos por el importante partido contra el Betis Deportivo. El sueño de un club histórico de ascender a la Primera RFEF estaba a solo a 90 minutos y la familia del Europa entera se volcó para apoyar a su equipo en un día muy especial.
El ambiente era enternecedor. Familias enteras, grupos de amigos y seguidores de todas las edades se reunieron en el barrio, donde llenaban de color blanquiazul las calles. El Nou Sardenya, la casa del equipo desde 1940, se vestía de gala para recibir un partido más, pero este, podría ser uno de los más importantes de su historia.
La afición
Pol Vila, un habitante del barrio y un aficionado de toda la vida del Europa, asegura que “para nosotros, los aficionados, este partido es más que un simple partido, es una oportunidad de ver a nuestro equipo crecer y poco a poco volver a donde nos merecemos”. El Nou Sardenya, feudo del Europa, colgaba el cártel de ‘Sold Out’. “La energía en el barrio es increíble, todos estamos unidos en el deseo de ver al Europa resurgir. Subir a la Primera RFEF sería un sueño hecho realidad para todos los que hemos estado apoyando al club durante años”, afirma el aficionado del club.
Desde dentro del club
Daniel Peñín, entrenador de fútbol base del Europa, ofrece una visión de cómo se vive un partido de tal magnitud dentro del club: “El ambiente dentro del club es de una mezcla de nerviosismo y esperanza. Sabemos que un ascenso no solo sería histórico para el club, sino que también representaría un logro para todo el barrio. Tanto la afición como los jugadores han trabajado duro toda la temporada, pero también están motivados”.
El entrenador también destaca como se ha vivido esta semana previa al partido desde dentro del club por parte de los más pequeños, “ellos son conscientes de lo grande que es el club, tanto en Barcelona como en Cataluña, han estado tota la semana nerviosos y con ganas de que llegará el día del partido”.
El partido
A medida que se acercaba la hora del partido, la tensión y la emoción en el Nou Sardenya no paraban de subir. Los cánticos y el tifo de la grada de animación “Eskapulats” animaban y daban voz por todo el estadio, además los desplazados del Real Betis Deportivo contestaban con cánticos, creando un gran ambiente futbolístico. Sin embargo, a pesar de la intensidad y las ganas demostradas en el campo, el Europa no pudo remontar la eliminatoria ante un gran Betis Deportivo. El partido terminó con un marcador de 1-3 en contra del equipo local y un 1-5 en el global, lo que significaba que el sueño del ascenso desaparecía.
Reflexiones en voz alta
El pitido final dejó una mezcla de tristeza y orgullo entre los seguidores del Europa. Aunque el resultado fue desfavorable, el esfuerzo del equipo y la gran afición del Nou Sardenya mostraron la grandeza de un club histórico . Daniel Peñín, después del partido, afirmó que “es una pena no haber logrado el ascenso, pero los jugadores lo dieron todo. Vamos a seguir trabajando duro desde dentro del club y este no será el final de nuestros sueños de ascender”.
Por su parte, Pol Vila, aunque decepcionado, se mostró optimista sobre el futuro: “Perder en un día como hoy es muy duro, pero estar aquí, ver a tanta gente del barrio, del club apoyando al equipo, me llena de orgullo. Solo espero que esto sea el inicio de algo grande, que la gente que haya venido hoy se enganche a nuestro club como lo estamos muchos de nosotros ya”.
El espíritu del barrio
El partido contra el Betis Deportivo, aunque no se logró el ascenso. El Club Esportiu Europa demostró la pasión de todo el barrio de Gracia. La ilusión de llegar a la Primera RFEF sigue viva para la siguiente temporada que el club y sus seguidores continuarán trabajando para el objetivo.
El espíritu del Europa y de su afición es un testimonio de la importancia del fútbol a nivel de comunidad. Más allá de los resultados, es la pasión lo que define a este club histórico. Así que, aunque el ascenso no se consiguió , el Europa y su barrio seguirán luchando, con la esperanza de un histórico del fútbol español.