Elia Marcos GarcíaLa tecnología de los chartbots ha traído al mundo a un nuevo robot que ofrece conversaciones cotidianas para ayudar a los usuarios a sentirse mejor a cualquier hora. Se llama Woebot y actúa como programa informático que se preocupa de tratar las emociones de los demas, o por lo menos eso es lo que aparenta hacer.
Como cualquier otra inteligencia artificial como Siri o Google Home, Woebot va aprendiendo por sí solo a través de su experiencia con sus interlocutores. Este proceso recibe el nombre de machine learning. La revista MIT Technology Review publicó la experiencia de un usuario con Woebot, que demuestra que los pacientes tienen la sensación de que el robot razona con ellos y es capaz de resolver problemas. En realidad, esto lo consigue mediante imitación y una adaptación flexible a los datos externos. Sin embargo, el hecho de que estas tecnologías mejoren con el tiempo supone que al principio puedan resultar algo defectuosas.
Uno de los beneficios principales de este robot, que cuenta con una app propia, es que posibilita los tratamientos a distancia sin la necesidad de encajar el horario. Una función atractiva a día de hoy por el confinamiento causado por la crisis del Covid-19, que no permite actividades en el exterior salvo por necesidades básicas en muchos países del mundo. Así, las personas que necesiten una pequeña ayuda para vivir el día a día con más positividad tienen la opción de hacer uso de este servicio.
Tratamiento de datos
La implicación de estas máquinas en el ámbito psicológico ha empezado a popularizar el término “ciberterapias”. Con este novedoso concepto ha nacido también cierta preocupación por el tratamiento que se hace de los datos de los usuarios. Al fin y al cabo, los pacientes explican sus inquietudes y proporcionan información privada. Por lo tanto, la idea de que alguien pueda ver la conversación o que incluso se difundan datos personales no resulta especialmente agradable.
En el podcast de AULA NEWS publicado en esta información se resuelven las dudas que pueden surgir acerca del tratamiento y protección de datos de este tipo de chatbots. Xavier Salla, especializado en comunicación tecnológica y director de la Fundación OBICEX, que trata de mejorar la calidad de vida profesional y humana basándose en la tecnología, explica qué puede suponer la combinación de robots y psicología para una sociedad cada vez más inmersa en el mundo digital.
