Marc AguilàEspaña es el país que se mantiene en la cima del ránking con más jóvenes con ludopatía en toda la Unión Europea y eso que se superan ya los 500.000 que están sin diagnosticar. Oscar Pino, miembro del Consejo General Asesor de Salud Mental y Adicciones de la Generalitat de Catalunya y vocal de la Junta de Gobierno del COPC, asegura que “a raíz de la pandemia ha habido un gran incremento en las adicciones”.
Los ratos en compañía se han transformado en “apuestas online en solitario a través de las pantallas”, dice Oscar Pino. A partir de las mismas, los anuncios que publicitaban casas de apuestas se encontraban omnipresentes en los medios de comunicación. Sin embargo, gracias a la nueva ley de comunicaciones comerciales de las actividades de juego ahora solo aparecen en la madrugada y fuera de canales de la Liga. A pesar de la gran influencia que hayan podido tener, Pino asegura que “todos tenemos parte de responsabilidad social”.
La entrada a la ludopatía
La gente que sufre ludopatía empieza a apostar “con las monedas que le sobran”, como forma de diversión y así lo testifica un afectado. En España, de la misma forma que sucede en el Reino Unido, las zonas más pobres son aquellas en las que más se apuesta y en las que más establecimientos hay, según un estudio publicado por El Confidencial. El psicólogo y coordinador de entidades de salud mental Oscar Pino, no da crédito de “los pacientes que pueden llegar a perder las viviendas por máquinas tragaperras” y confirma que la gente que se queda enganchada en este punto “tiene un gen” que les hace sentir algo que él no puede.
Este “algo” para el testimonio es “la sensación de ganar mucho dinero en poco rato” lo que lo atrapaba. También lo que finalmente lo llevó a gastar “300 o 400 euros al día”, convencido de que “recuperaría” todo lo perdido el día anterior. El peligro de esta adicción puede pasar fronteras y afectar también a las personas que te rodean. “Perdí el dinero de un viaje con amigos por pensar que lo duplicaría”, confesó el joven ludópata. Por ello, Pino mantiene que “alguien que no sepa cómo salir que pida ayuda, si te pasas con el juego te puede arruinar la vida”. Por esta razón el ludópata entrevistado no recomienda para nada meterse en este mundo, “a pesar que al principio lo veáis como un pasatiempos y perdáis solo 2 o 3 euros, a la larga estaréis enganchados”.
