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Elda Mata, presidenta de SCC: “Tenemos una opinión totalmente contraria a la amnistía y la hemos reforzado con nuestra presencia como acusación popular”

La presidenta de la asociación traslada su preocupación por el nacionalismo catalán y critica duramente el gobierno del Partido Socialista y sus concesiones al independentismo

Elda Mata, presidenta de Societat Civil Catalana, hablando durante una entrevista. Vía: César Calvo
Cesar Calvo Marin Cesar Calvo Marin

Elda Mata Miró-Sans (Barcelona, 1953) lleva años vinculada a SCC, ya que antes de su actual cargo ya fue vicepresidenta de la entidad. Hasta ahora, ha centrado su trayectoria profesional en la provincia de Girona, donde ha trabajado como empresaria y gerente de algunos negocios agropecuarios y turísticos. Desde 1983, además, vive en Ullà, un pequeño pueblo del Empordà. Preside SCC desde marzo de 2022.

P ¿Societat Civil Catalana sigue fiel a su esencia?

R Somos una entidad cívico-cultural con el objetivo de defender los derechos de los ciudadanos de este “procés” que lleva casi 45 años en Cataluña, y que hace que los españoles estemos divididos en primera y segunda categoría en función de la catalanidad que nos da el gobierno nacionalista de la Generalitat.

P ¿Cuál es la opinión de la entidad sobre la recién aprobada ley de amnistía?

R Tenemos una opinión totalmente contraria a la amnistía y la hemos reforzado con nuestra presencia como acusación popular en el caso de Tsunami Democràtic, exigiendo que se devuelva el dinero malversado para realizar el referéndum ilegal del 1 de octubre. Pondremos todas las posibilidades a nuestro alcance para que no se implemente esta ley.

P ¿Esta ley no podría llegar a ayudar a la convivencia?

R Se trata de una concesión más del gobierno y eso provoca que el nacionalismo sea más fuerte y se favorezca a la ruptura de la sociedad catalana. Yo vivo en Girona y he presenciado vandalismo. A día de hoy en las calles no se ven los tumultos que había en el año 2017, por qué ahora es mucho más sutil la manera de llevar a cabo la demolición de las líneas rojas que nos mantenían dentro de un marco legal, haciéndolo desde los despachos. La situación es infinitamente más grave.

P ¿Cree que la Generalitat usará la propuesta de referéndum vinculante como moneda de cambio para apoyar al gobierno durante la legislatura y será aceptado?

R Los nacionalistas tienen una hoja de ruta muy clara y acaba en una separación de Cataluña del resto de España. Cuando nosotros decíamos “ni amnistía ni autodeterminación” es porqué sabíamos que tras la amnistía iban a ir a por la autodeterminación. Tras los indultos y la amnistía, ¿por qué no deberíamos pensar ahora que la autodeterminación no es posible?

P Las últimas elecciones generales las ganó el PP pero se vio muy limitado para poder formar gobierno. ¿Cree que el Partido Popular debería intentar tender puentes con aquellos partidos nacionalistas más próximos en ideología?

R Societat Civil Catalana nunca hace valoraciones políticas sobre lo que deberían hacer o no los partidos políticos excepto en lo que tiene que ver con el nacionalismo. Consideramos que el PP ha puesto poco freno al nacionalismo, pero lo que hay ahora es un desenfreno. Por supuesto que en una democracia hay que consensuar, pero dentro del marco legal que marca nuestra constitución.

P ¿Hasta qué punto ese marco legal del que habla considera lógico que pueda llegar a limitar la voluntad de la mitad de la población de un territorio? ¿Considera la modificación de la Constitución para que contemplara la voluntad del 50% de los catalanes?

R Modificar la Constitución está contemplado dentro de nuestra propia Constitución, pero hay unos requisitos, y se necesitan unos consensos muy amplios. La ley de amnistía no goza de ese amplio consenso, eso no es una manera de tirar adelante una ley tan fundamental. La Unión Europea dice que uno no hace cambios tan radicales sin contar con el apoyo de la otra mitad del país.

P ¿Supondría una humillación para España la vuelta de Puigdemont? ¿Qué respuesta habrá de la comunidad europea?

R Si Puigdemont vuelve y el juez Llarena decide lo que ha dicho hasta ahora, deberá ir a juicio, si no, entraría legalmente y por lo tanto la comunidad europea no diría nada. Precisamente, el día 11 de abril en Europa se decidirá si Puigdemont debió tener inmunidad parlamentaria. Somos muchos los que haremos todo lo posible para que este señor responda por sus delitos. Los españoles de bien tenemos que hacer todo lo posible para que no vuelva.

P Si el PSC gana las elecciones, cree que habrá un pacto de izquierdas con ERC o habrá un gobierno contrario a la independencia con los apoyos del PP?

R No me aventuraría a decir lo que puede pasar. Me gustaría que cambiara el régimen totalitario y nacionalista que hemos tenido tantos años en Cataluña y que hubiera la posibilidad de gobernar desde unas instituciones que respetaran a todos los ciudadanos por igual y disfrutáramos de los derechos que tienen todos los españoles en el resto de España.

P Según las encuestas Aliança Catalana tendría opciones de entrar en el Parlament, ¿qué opina de este posible escenario?

R Tenemos una posición antinacionalista y este partido es radicalmente nacionalista. Son partidos que necesitan un enemigo para sentirse superiores y excluir a los demás. Ni siquiera reconocen que es una ideología perversa.

P Hasta ahora, cuando ha gobernado la derecha, se ha respondido con cierta dureza a las aspiraciones independentistas y a la vez, cuando esto ha ocurrido el nacionalismo ha incrementado sus apoyos. ¿Cuál cree que es la solución que se debería dar para frenar la crisis catalana?

R La crisis catalana trata de los que vivimos en Cataluña, mayoritariamente contrarios al nacionalismo. El nacionalismo se ha encontrado con unas administraciones a su favor y unos medios de comunicación que perpetúan la situación a su favor, controlados por el régimen nacionalista, las escuelas, la cultura… todo rodeando al nacionalismo como si fuera el eje, cuando el eje es el ciudadano.

Entrevista completa:

Cesar Calvo Marin

Soy estudiante de periodismo de la Universitat Abat Oliba de Barcelona. Estoy muy interesado en la política de España y del resto del mundo y mi sueño es dedicarme al periodismo político.