Cataluña ha amanecido este lunes de resaca electoral menos independentista que nunca y dejando un panorama político muy incierto. El PSC sale victorioso de los comicios, pero sus 42 diputados no son suficientes para gobernar en solitario. Los protagonistas de esta victoria son Salvador Illa, que ha asumido durante la campaña el discurso de la antigua Convergència, y el efecto amnistía de Pedro Sánchez, que parece haber beneficiado más a los perdonadores que los perdonados. Junts per Catalunya se erige como segunda fuerza en el hemiciclo. Su líder, Carles Puigdemont, no renuncia a formar gobierno e insta a ERC a rechazar pactar con los socialistas.
Por su parte, ERC ha sufrido una importante debacle al perder 13 diputados, pasando de 33 a 20 escaños. Tras afirmar el domingo que su partido actuaría como oposición, el líder d’ERC, Pere Aragonès, abandonó el pasado lunes la primera línea política en un acto de “responsabilidad” y sin aclarar si su partido apoyaría un gobierno de Illa o de Puigdemont. El PP supera todas sus expectativas y quintuplica sus resultados, convirtiéndose en la cuarta fuerza del Parlament. Los de la formación de Alejandro Fernández aprovechan la desaparición de Ciudadanos, absorbiendo sus 6 diputados, y dan el sorpasso a VOX, que mantiene sus 11 escaños pero aumenta en número de votos.
Un nuevo rumbo político
La sorpresa estos comicios la ha dado Aliança Catalana, que entra por primera vez en el Parlament con 3 escaños. Los Comuns lamentan perder 2 asientos, pero ven posible un gobierno de izquierdas. La CUP desciende a 4 diputados y advierte que, tras estas elecciones, queda un Parlament “más españolista y más de derechas que nunca”.
En este escenario, al PSC se le plantean dos opciones: o tripartito independentista con ERC y Comuns o un gobierno que superaría la mayoría absoluta con Junts. Pese a todo, se vislumbra también la opción de la repetición electoral en octubre, debido al bloqueo que puedan generar las condiciones de los de Puigdemont.
Se inicia, pues, tras estos comicios, lo que muchos denominan “la etapa post-procés”: estamos frente a los peores resultados del independentismo desde 1980. Cataluña tratará de formar gobierno los próximos meses con la vista puesta en las Elecciones al Parlamento Europeo, que se celebrarán el próximo 9 de junio.